jueves, 21 de mayo de 2009

LA CONCIENCIA Y EL SENTIDO COMÚN, AUSENTES SIN AVISO


No puede negarse, por consiguiente, que la educación tanto de los niños, cuanto de las niñas, debe de presentarse como un objetivo primordial y fundamental, de que deben de cuidar con celo incuestionable los legisladores, con herramientas de precisión, para su correcto uso por el Poder Judicial

Por Ovidio H. Zanzero

La conciencia, resulta la capacidad sensorial y perceptiva que una persona posee de si mismo, del hecho o circunstancia de existir y del trato, comunicación o conexión con su mundo, constituidos en sociedad, con conocimiento exacto y reflexivo de las cosas. En forma general, ello es así, desde la razonable actitud. Ahora bien, supongamos que un grupo de personas con ocultas y malévolas intenciones, con las facultades de conciencia totalmente anuladas; sin temor de DIOS, y con la impunidad necesaria que les brinda el poder o se lo toman, decide con irracionalidad el disparate, la locura, el absurdo, la extravagancia y/o el desvarío de maltratar a niños; chicos como comúnmente se los mencionan y que nada tiene que ver con la realidad, dado que son sí, personas con cantidad de años menor vividos, pero en este caso, sin lugar a dudas nos demuestran ser portadores de una mayor conciencia y el adecuado sentido común que la totalidad de los adultos (*) que han intervenido en los acontecimientos que se vivieron en el fin de semana ppdo. en el ‘HOGAR SAN JOSÉ OBRERO’; ubicado en el barrio de Chacarita de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, regenteado por la Fundación “Felices los Niños” –(*) cuando menciono a los adultos, lo hago sí, en forma especifica, referido únicamente a todos aquellos que desde sus funciones tenían la facultad de decisión y se transformaron con sus resoluciones o temperamentos en vestías de costumbres inmorales e insensibles-.

Como resulta obvio, dejo las costumbres inmorales, a la libre conclusión de quienes lean estos conceptos, por lo tanto me referiré en el desarrollo a la inclinación a dejarse llevar por los sentimientos de compasión, humanidad y ternura, que esta capacidad, aptitud o potencia moral de sentir algo por naturaleza, debiera de representárseles como sensibilidad; (a propósito y por sí, alguno de estos, por descuido lee el presente, les informo de que se trata la sensibilidad) El estudio sobre la sensibilidad se ocupa de la facultad sensitiva y de lo sensible, conocer qué es el alma exige este estudio. La sensibilidad así, resulta la capacidad para captar sensaciones a través de los órganos de los sentidos, poniéndolo a disposición de la conciencia, pero cuando se carece de esta, la situación comienza a ser un caos, ahora bien hemos nombrado al alma, con la misma finalidad digo; en una persona es la parte espiritual e inmortal, con capacidad de entendimiento, de querer y sentir, de esta forma juntamente con el cuerpo, constituye la esencia humana, que al no dar el servicio adecuado, como en este procedimiento irracional, mucho se asemeja al comportamiento animal.

Que distinto habría sido todo, si el adulto comprendiera que actuó y resolvió mal, que tanto la brutalidad, como lo irracional de su comportamiento, en la aplicación de soluciones y de propuestas por parte de los responsables, se hubieran caracterizado por sentido común, en lugar de incrementar elementos que ligan en la mezcla de la infelicidad, por disgregación y temor, dentro del componente esencial que es su perimundo y todo lo que para el niño representa, con agresividad y desorganización, demostrando sin duda alguna, la imbecilidad manifiesta, como la falta ética-profesional y preparación adecuada, ante el problema que se presentó y que se potencializó, como producto de propios errores, en lugar de tomar la cuestión precisamente por tratarse de niños, desde la formación, educación y futuro desarrollo.

No puede negarse, por consiguiente, que la educación tanto de los niños, cuanto de las niñas, debe de presentarse como un objetivo primordial y fundamental, de que deben de cuidar con celo incuestionable los legisladores, con herramientas de precisión, para su correcto uso por el Poder Judicial, (con competencia en la materia).

Las noticias y acciones internacionales son ricas y abundantes en este aspecto, señalando que en el lugar que fuere, que la educación es atendida deficientemente, así el Estado cuanto la sociedad, reciben el duro golpe de su funesto proceder; el remedio consiste, en la conciente y correcta aplicación de la ley, a su vez esta, debe de tener compatibilidad absoluta con la Constitución y sus normas adheridas a los pactos internacionales.

Para finalizar sólo se me ocurre hacerlo, no llegando a mi seguridad absoluta, de que lo puedan interpretar los adultos a los que específicamente me dirigí, que no son otros, que los responsables de la conducción, desarrollo y evaluación de los hechos sucedidos en el Hogar San José Obrero; por los cuales los ciudadanos nos sentimos heridos y avergonzados; “…Para Aristóteles, la ética está relacionada con el buen vivir o bienestar, se encuentra unida en cuanto a la formación en tanto el niño y la niña necesitan de normas para llegar a ser lo que son; un hombre una mujer.

Los niños son potencialmente adultos, pero que los niños crezcan no significa necesariamente lleguen a ser un hombre, una mujer, tal como deben ser, un hombre, una mujer. Y un hombre, una mujer, deben ser como la forma o la esencia de hombre y mujer. La forma o esencia de hombre y mujer es la norma. Tener una norma es tener una prescripción de cómo deben ser las cosas…” - HARTNACK, 1994

http://deucalion-info.blogspot.com/

IR a la portada de Diario7 Blog



No hay comentarios: